Blog

Todas las empresas que comercializan bienes físicos sabrán que el inventario es un mal necesario, generalmente se relaciona con un montón de cosas por contar y que ocupan espacio. Pero la administración que se requiera para almacenarlo va a depender de las necesidades y del método de control de inventarios que se implemente; y ya te estarás preguntando ¿cuál elegir?, aunque todas las empresas desean evitar pérdidas, reducir costos, espacio, mejorar la productividad y mejorar la atención al cliente también cada empresa tiene sus necesidades específicas que debe considerar para elegir el control de inventarios  más conveniente, aquí te mostramos algunos métodos conocidos para la administración y el control del inventario:

1. Niveles mínimos de mercancía.
2. Cantidad Económica de Pedido (EOQ).
3. Punto de Reorden.
4. Stock de Seguridad.
5. El Sistema ABC.
6. JIT.
7. FIFO.

Antes de la implementación de algún método es necesario realizar un monitoreo del material mediante un sistema de inventario para conocer cómo se comporta y tener un reporte histórico o una base sobre la cual podamos tomar la mejor decisión, además de poder generar pronósticos de demanda y asignación de políticas de inventario, entre otras cosas.

Niveles mínimos de mercancía

Con este método se busca reducir el espacio y manejo de inventario al mínimo pues sólo se solicita más mercancía cuando los productos existentes han llegado a un nivel o cantidad mínima previamente determinado de acuerdo a sus pronósticos de demanda, esto te permite no quedarte sin mercancía para abastecer tus pedidos, pero al mismo tiempo evitar mantener costos de exceso de inventario.

Cantidad Económica de Pedido (EOQ)

Si estás pensando en implementar el método anterior también te estarás preguntando como hacerle para determinar la cantidad que vas a pedir para reabastecerte y como encontrar un equilibrio entre un inventario demasiado grande o pequeño, es ahí donde puedes usar el método de orden en cantidad económica o por sus siglas en inglés EOQ (Economic Order Quatity). Para poder usar este método es necesario utilizar una fórmula que busca encontrar el costo más bajo para ordenar la mercancía y minimizar costos de inventario total, en donde la siguiente información es crucial:

D: Demanda. Unidades por año.

S : Costo de emitir una orden.

H : Costo asociado a mantener una unidad en inventario en un año.

Q : Cantidad a ordenar.

Para manejar este método se tienen los siguientes supuestos que debes considerar:

• La demanda se conoce, es constante y continua (uniforme).
• El plazo de entrega se conoce y es constante.
• El producto se adquiere en lotes del mismo tamaño y se recibe todo junto, no en partes.
• No hay descuento por cantidad ni se permiten inexistencias (Faltantes).
• Los únicos costos variables son el costo de hacer un pedido y el de mantenimiento.
• Los pedidos se realizan para evitar la escasez.

Punto de Reorden

Una vez que la empresa ha calculado su cantidad económica de pedido debe determinar su Punto de Reorden el cual se refiere a ordenar el inventario cuando llegue a cierto nivel para determinar lo siguiente:

• La cantidad de inventario que se debe mantener.
• La fecha en que se deberán colocar las órdenes.
• La cantidad de unidades que se deberá ordenar cada vez.

Este punto puede variar según la estabilidad de la demanda y del plazo de entrega. Si ambos son estables, éste se puede calcular multiplicando su demanda con el plazo de entrega.

Stock de Seguridad

Una vez vistos los métodos anteriores y siendo previsor vas a querer saber qué acciones tomar si tu demanda aumenta y no cuentas con mercancía suficiente, el método que debes implementar es el Stock de Seguridad la cual se refiere a la cantidad adicional de inventario por encima del nivel normal, que se ordena o se transporta para evitar el desabasto en caso de alguna incidencia. Esta también se calcula mediante una formula compleja, sin embargo, es común que las empresas lo calculen mediante un software que lo hace automáticamente.

Utilizar este método o no, depende de las necesidades y la situación actual de tu empresa, si tu presupuesto es corto posiblemente manejar un stock de seguridad sea un dolor de cabeza en lugar de una solución.

El Sistema ABC

El siguiente método es un poco más complejo pues está dirigida a empresas que manejan diferentes clases de productos y el objetivo es monitorear la mercancía. Se debe analizar los inventarios para clasificarlos en 3 grupos A, B y C con base en su valor, manejo y número de partidas. Comúnmente el 80% del valor del inventario lo representa el 20% de los artículos, y el 80% de los artículos representan el 20% de la inversión, con todo esto hablamos del dinero que representa tu mercancía y como verás se utiliza el Análisis de Pareto en este método.

¿Qué representa cada grupo que hemos clasificado?

A: inventarios que representan el 80% de la inversión y el 20% de los artículos.

B: inventarios con un valor medio y que representan una cantidad menor que los C.

C: inventarios con el menor valor y que son una gran cantidad de artículos.

La segmentación de productos permite que la asignación de políticas más laboriosas se enfoque sólo en material que genere el mayor impacto en la empresa.

Deben hacerse excepciones del sistema ABC para ciertos tipos de

materiales:

• Materiales críticos para producción.
• Materiales con vida de almacenaje corta.
• Materiales grandes y voluminosos.
• Materiales voluminosos sujetos a robo.

JIT

El método Just In Time (JIT) es uno de los más populares en el área de manufactura pues el objetivo es entregar el inventario al piso de producción a tiempo para usarlo. El método JIT sólo entrega las cantidades exactas para completar la producción actual, ni más ni menos. El control de inventario JIT depende mucho de la capacidad con la que los proveedores de la empresa entregan bajo demanda e incluso muchas veces cuentan con un almacén cerca de la fábrica.

FIFO

First-in, First-out más que un método es un principio muy importante en el manejo de inventarios y sobre todo en aquellos que son perecederos. El principio va a requerir de un almacén bien organizado pues establece que tus productos con mayor antigüedad (First-in) se venden primero (First-out). Para aquellos productos que no son perecederos también es bueno usar este principio pues los productos entre más tiempo estén almacenados corren el riesgo de desgastarse o las etiquetas o presentaciones pueden descontinuarse volviéndose obsoletos y negados para venta.